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viernes, 9 de octubre de 2015

REFLEXIÓN: IDONEIDAD Y ADECUACIÓN DE LA ROBÓTICA EN EL AULA

Cuando me he planteado introducir la robótica en el aula no ha sido mi intención desterrar nada y sustituirlo todo por hacerlo con la Blue Bot. Mi robot tiene su tiempo y su espacio en el aula, y convive con los maravillosos libros de literatura infantil, nuestro trabajo por rincones, los proyectos, las asambleas, las sesiones de psicomotricidad, las matemáticas, la lectoescritura y las emociones que vivimos día a día en el aula.

Este curso comenzamos la presentación del proyecto con el tesoro de Blue que nos va a ayudar en nuestro viaje por el tiempo.

Al igual que ocurre con la tablet, la pizarra digital y otras herramientas es un recurso más que tenemos en el aula que está presente en la realidad del niño/a y al que también tenemos que dar una respuesta educativa.

Lo que más me gustó cuando me planteé el trabajo con este robot es las posibilidades de desarrollo matemático en la competencia de representación espacial que suponía para mis alumnos/as. Tras iniciar el curso y ver las posibilidades que me ofrece el pensamiento computacional referente a :

  • El aprendizaje científico y tecnológico.
  • El desarrollo del pensamiento lógico.
  • Desarrollo de la creatividad y de entender las cosas que hacemos.
  • Aprender a pensar a ordenar y formular ideas.
  • Despertar las ganas de aprender.
  • Te enseña a resolver problemas.
Pues sí , si esto me aporta el trabajo de la robótica con más sentido lo quiero en el aula.

Además en la metodología de trabajo que desarrollo en el aula de proyectos y rincones siempre estoy atenta a los intereses de mis alumnos/as, mirando en sus bolsillos. Bolsillos que encuentro llenos de piedras, balones, muñecas/os, coronas, lápices, dinosaurios, animales, coches, ponis, agendas, naves espaciales, teléfonos móviles (de juguete), artefactos infantiles y robots. Tengo una rutina en la asamblea donde recojo sus sueños y todos estos elementos están presentes.

Recogida de esta mañana, donde conviven tecnología, animales, escritos, emociones y cuentos.
Los robots son mágicos y suponen una fuente de motivación y emoción de nuestros alumnos/as así que por qué no trabajar también con ellos.

Uno de los juguetes que a menudo presentan en la asamblea.
Respecto a la paridad en el aula de Infantil no detecto que muestren más interés las chicas o chicos, todos quieren manejar a Blue y en las propuestas que hemos empezado a trabajar de robótica con el ipad tienen el mismo nivel de motivación e interés. Teniendo en cuenta que está muy presente la creatividad de contar historia y eso a mis chicas y chicos les encanta.

Nuestra primera experiencia con ScratchJr
Me interesó mucho escuchar la conversación en el chat del martes al referirse a infantil enfatizando la necesidad de conocer el mundo y su entorno, que es muy importante realizar ordenes físicas sobre los robots y que no hay que tener prisa y no precipitarnos.

Blue cumple el requisito de ordenes físicas.
 Totalmente de acuerdo pero no solo en este ámbito, la pena es cuando los inflamos con métodos y fichas, sentados en las mesas, para que se vayan preparado para primaria. Desde la competencia que más sigo que es la matemática se destaca la necesidad del trabajo manipulativo por todos los autores que conozco, y no es una moda, los expertos lo manifiestan desde hace mucho tiempo. Sigo siendo muy crítica con este aspecto porque veo la realidad en algunas aulas y realmente es necesario esa forma metodológica.

También podemos introducir los aspectos de uso razonable y seguro, éticos y valores implícitos en todos este consumo real que hacen nuestros niños/as de tecnología, incluidos los robots. La escuela no puede dar la espalda a este mundo.

Otro punto  del que se ha hablado es el lápiz y la goma de borrar. Recuerdo hace más de 20 años, cuando cursaba programación en una rama de FP, los folios y folios que llenábamos solo con gráficos y secuencias de órdenes. Podemos hacer robótica con lápiz y papel , cajas, cartulinas, pegamento, plastilina, recortables...


Lanzada y emocionada intenté resolver un conflicto con el pensamiento computacional, ayudada por mis alumnos que iban verbalizando lo que podía suceder. Me falto preparación, estudio y eficacia porque no hice bien la secuencia ya que fue todo improvisado, pero me dio la idea para trabajos futuros.

Pero lo más importante como se ha dicho:


EDUCAR PARA EL MEJOR DESARROLLO DE LA PERSONA Y SIEMPRE FELICES.


Y si los robots nos pueden ayudar a ello que sigan en mi aula. Quiza alguno de mis futuros ingenieros e ingenieras consigan desarrollar sus sueños y mejorar los sueños y vidas de otras personas.




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